Revisemos algunos mitos sobre la depresión
La depresión es mucho más que sentirse triste. Incluye una amplia gama de síntomas como fatiga, cambios en el apetito, problemas de sueño, pérdida de interés en actividades antes placenteras y dificultades cognitivas.
La depresión no es simplemente una falta de voluntad o debilidad. Es una enfermedad mental compleja que involucra factores biológicos, genéticos y ambientales. Superar la depresión no es tan simple como «ponerse de pie» o «ser fuerte». Requiere tratamiento adecuado, que puede incluir terapia, medicación o una combinación de ambos.
La depresión puede afectar a cualquier persona, independientemente de su situación socioeconómica, género o edad. No discrimina basándose en factores externos.
En realidad, hablar sobre la depresión puede ser el primer paso hacia la recuperación. Abrirse a amigos, familiares o profesionales de la salud mental puede ser fundamental para obtener apoyo y tratamiento.
Para muchas personas, la depresión es un trastorno crónico. Si bien el tratamiento puede ayudar significativamente, no es algo que desaparezca de la noche a la mañana. Se requiere tiempo y esfuerzo.
A veces, la depresión puede manifestarse sin una causa identificable. Puede estar relacionada con una combinación de factores genéticos, biológicos, ambientales y psicológicos.